Cualquier persona que esté metida dentro del sector de la fabricación mecánica con unos mínimos conocimientos de armas, sabe que es muy fácil construir una. Y no hace falta disponer de ningún tipo de máquina sino que basta con tener los contactos que las tengan.
Lo que sí que tiene mérito de este proyecto es que hace que la fabricación de este tipo de juguetes con capacidad de disparar de verdad sea algo tan fácil como montar un mueble del Ikea.
Por una parte no creo que llegue a poner en peligro la seguridad nacional de ningún país más que la integridad física de quien lo dispare porque ni los materiales ni las tolerancias de fabricación son las adecuadas. Por otra, existen desde hace ya mucho tiempo instrucciones sobre fabricación de explosivos en Internet que potencialmente son más peligrosos. Insisto que el mayor peligro de toda estas cosas es que cualquiera las puede fabricar y sin un mínimo de conocimientos puede resultar muy peligroso para su propia integridad.
Personalmente el detalle que más me gusta es la forma con la que ha resuelto el muelle del percutor porque el diseño y la fabricación de resortes de plástico no es precisamente sencillo. Quizás ha llegado ahí por prueba y error después de muchos intentos pero como ejemplo práctico de diseño de pieza de plástico es un ejercicio muy interesante.